Esta semana fue mi primera entrevista de trabajo. Desde antes de llegar a Montreal había estado enviando CVs pero sin mucho éxito. La clave para conseguir la entrevista esta vez yo creo que fue el curso que tomé la semana pasada sobre la integración al mercado laboral. En el curso (que duró 1 semana) aprendí mucho sobre la cultura laboral aquí y la forma de pensar que "generalmente" tienen los québécois para contratar. Y lo pongo entre comillas porque en la entrevista me di cuenta que las cosas pueden ser muy diferentes en la teoría y en la práctica. Lo que pasó fue que en este caso mi potencial empleador era un inmigrante también, ya establecido aquí hace varios años pero que aun conserva algunas prácticas laborales no muy canadienses que digamos.
Por ejemplo, en el curso vimos que no se debe mencionar en el CV ni edad, ni estado civil, ni nacionalidad ni nada de esos detalles que puedan dar lugar a discriminación. Y así lo hice, pero en la entrevista telefónica, me preguntó todos esos detalles directamente. Además, durante la entrevista en persona me amenazó comentó que en ocasiones habría que ampliar el horario de salida sin que se pagaran horas extra y en cuanto al salario, me ofreció algo muy por debajo del rango publicado por Emploi-Québec para ese puesto.
Saliendo de la entrevista me sentí desilusionada, la primera impresión que me deja Canadá es que las cosas no son muy diferentes aquí. Pero ahora que lo he digerido un poco más, creo que la lección es que tengo que estar firme en lo que quiero, y también se vale ser selectivos y exigir que se respeten las condiciones laborales establecidas en este país.
Es decir, no hay que generalizar, hay miles de empresas en esta ciudad y en cada una hay situaciones y personas diferentes. Además, si vine a este país fue para vivir en condiciones mejores. Sé que tengo que hacer sacrificios, y empezar de cero y todo eso, pero también hay que tener cuidado y no dejar que se aprovechen de uno.
Así las cosas, esto sigue siendo una prueba de paciencia. Pero si de algo estoy segura es que el que persevera alcanza. Como diría Serrat: Tiren pa'lante que empujan atrás!
Así las cosas, esto sigue siendo una prueba de paciencia. Pero si de algo estoy segura es que el que persevera alcanza. Como diría Serrat: Tiren pa'lante que empujan atrás!